Me dijo que me estaba esperando, que hacía días que me esperaba. Le regalé una antigua cámara de fotos Kodak 20, creo que hasta tiene dentro un carrete antiguo sin revelar, será porque mi familia nunca ha querido atarse a los recuerdos, será que cada recuerdo que uno pierde o guarda nos suman dos o tres kilos más a nuestro equipaje vital.
«He recorrido medio mundo, a veces cuando pienso en mi hogar no sé ubicarlo en el mapa, mi corazón está repartido entre mis raíces y mi casa, mis raíces las dejé en Portugal hace ya muchos años, cuando tenía 19, y este lugar ha sido mi casa a partir de ese momento.»